Todos debemos (o deberíamos) aceptar a nuestro compañero(a) de vida, por encima de todo (diferencias, defectos y más); sin pretender minimizarlo y/o cambiarlo, al contrario, nuestro deber está en destacar sus virtudes.
Porque sin ser Dr. Corazón, o especialista en el ámbito del amor, creo que allí está el secreto de una gran relación; y como bien lo hace el grande Andrés Calamaro en su canción (muy dedicable, por cierto) “La parte de adelante”:
"Soy vulnerable a tu lado más amable,
soy carcelero de tu lado más grosero,
soy el soldado de tu lado más malvado,
el arquitecto de tus lados incorrectos,
soy propietario de tu lado más caliente,
soy dirigente de tu parte más urgente,
soy artesano de tu lado más humano,
y el comandante de tu parte de adelante".
Y es que, qué sabroso es amar y ser amado (y a los que no son correspondidos, les digo que: ¡Ya pasará el guayabo!) No, no soy psiquiatra, sexólogo, ni lanzaré una línea telefónica del amor. ¿Por qué digo esto?
Porque algunas personas, necesitan algo más que ganas, para cambiar su vida (y cuerpo), a través del ejercicio físico. La constancia y disciplina, son importantes para hacerlo; pero, el apoyo y motivación son determinantes, y ¿quién mejor que tu pareja para instarte?. ¿Y qué mejor manera de comenzar a hacer actividad física juntos, que a través del mejor ejercicio cardiovascular de la Tierra?… ¡El sexo! (o el amor, para los más románticos como yo)
Con tan sólo 20 minutos dándole al cuerpo lo que pide, se queman alrededor de 250 calorías.
Si es tan beneficioso, ¿por qué no aprovecharlo al máximo?
Acá una rutina de ejercicios que podrás realizar mientras tocas el cielo con tu cuerpo:
EL Misionero:
Aceleren la intensidad del sexo por 15 segundos para después descansar por 10 segundos con movimientos suaves y relajantes. Repitan de 10 a 20 veces o hasta que ya no puedan más.
Glúteos Y Tríceps:
Chica, en posición de “Perrito”, en vez de colocar tus manos paralelas a tus rodillas apóyate en una pared. Empuja como si estuvieras haciendo lagartijas y aprieta los glúteos con cada movimiento.